Pablo Fontanet, edil oficialista de San Isidro, brindó su opinión en RN de lo que sucedió ayer en "Bosque Alegre"; donde un grupo de asambleistas se pelearon con la policía sanisidrense para evitar que éstos continuaran trabajando en el predio que, para ellos, "estaba siendo desmontado brutalmente por el municipio". El edil aseguró que "ayer se vivió una situación lamentable".
Pablo Fontanet explicó el origen de cómo se desarrollaron los hechos para que desencadene en la problemática que sufrieron ayer, tanto vecinos de San Isidro, como funcionarios del Ejecutivo municipal. "Ayer en Bosque Alegre se vivió una situación lamentable. El año pasado la Municipalidad firmó un convenio con el CASI, a fin que este Club realizara unas canchas en esos terrenos y su mantenimiento durante el plazo del convenio. Canchas que se incorporaban al Campo de Deportes Municipal Nº 6, que utiliza la comunidad de San Isidro, particularmente del bajo, y distintas instituciones de la zona. El CASI lo utilizaría en los horarios que no lo ocupaba la Municipalidad. Esta mejora de instalaciones y en la oferta deportiva para niños de nuestra comunidad no representaba erogación alguna del Municipio".
Y siguió relatando: "Cuando el club comenzó los trabajos y realizó el corte de algunos árboles, inmediatamente se solicitó la interrupción de esos trabajos. A partir de ahí se forma una Asamblea que, sistemáticamente, se opuso a que se realizaran trabajos en el predio, el cual, vale aclarar, es de dominio municipal".
A su vez, el edil oficialista reiteró que "los miembros de la Asamblea fueron recibidos en reiteradas oportunidades por funcionarios municipales y el propio Intendente quien se comprometió a que no se talarían más árboles y que se iba a limpiar el terreno (donde no hay árboles) para avanzar con el Campo de Deportes".
"No obstante, el compromiso asumido por las autoridades municipales y algunos miembros de la Asamblea, mantuvieron una posición hostil con el municipio - en algunos casos instados por militantes políticos y concejales opositores -, siguieron con sus protestas, generando sospechas infundadas y desinformando a la opinión pública con afirmaciones erróneas".
También mencionó sobre el accionar del Intendente: "Gustavo Posse cumpliendo el compromiso asumido con los vecinos firmó un decreto declarando Paisaje Protegido al área comprendida entre la costa del Río de la Plata, la calle Del Barco Centenera, la calle 1, y la margen derecha del Canal de Desagüe, y a partir de los 140 metros de la línea municipal de la segunda de las arterias mencionada y a partir del límite del predio del Centro Municipal de Exposiciones. Espacio que se suma a la Reserva Natural Municipal, a las barrancas del Museo Pueyrredón y de la Quinta Los Ombúes, y a la conservación y puesta en valor de cinco kilómetros de costa natural, las cuales son preservadas con distintos niveles de protección según su valor paisajístico y natural".
E hizo fuerte hincapié en los hechos de violencia que vivieron de parte de un grupo de asambleistas que nada tenían que ver con la protesta. "Estas acciones, que se fueron consensuando con vecinos, el día de ayer, cuando personal municipal quiso ir a limpiar el predio - para avanzar con las obras del Campo de Deportes -, un grupo reducido y radicalizado de la Asamblea, le impidió realizar sus trabajos, que no consistía en tala alguna, ni corte de árboles, sólo se limitaba a la limpieza de basura y corte de pastizales. Ante esta situación se hicieron presente distintos funcionarios municipales y concejales a fin de buscar un acuerdo con quienes impedían los trabajos, aclarándole que los mismos obedecían a los compromisos por las autoridades comunales y que no se talaría ningún árbol más de los que ya se habían cortado, pero los asambleístas mantuvieron una posición intransigente y se negaron a buscar una solución que permita al personal municipal realizar sus tareas".
En contrapartida de lo que aseveraron los asambleistas a este medio, Fontanet aseguró que "luego de más de 5 horas de diálogo y ante la postura dura de los Asambleístas, el personal municipal retomó sus tareas y un grupo violento de quienes realizaban la protesta Asambleístas comenzaron a agredir física y verbalmente a los empleados, funcionarios y a los agentes policiales que estaba velando por la seguridad del lugar y de las personas que estaban allí. Esta situación violenta -no deseada ni motivada por el municipio, que siempre estuvo dispuesto al diálogo y a la búsqueda de consensos-, provocó la intervención policial persuadiendo a los agresores de desistir de la actitud, permitiendo que los trabajadores municipales realizaran sus tareas pero, lamentablemente, ante la posición intransigente de los Asambleístas hubo algunos forcejeos con la policía, que no llegaron a mayores y se continuaron los trabajos iniciados".